La actividad comercial ha cumplido un papel fundamental en el desarrollo de las sociedades permitiendo el intercambio de productos y servicios, para mejorar la calidad de vida de las personas. En la actualidad, las ventas reflejan los esfuerzos y motivaciones, tanto individuales como colectivos, para generar emprendimientos, consolidar actividades económicas sostenibles e impactar los mercados a mediana y grande escala, lo mismo que constituir empresas que ayuden a generar ingresos para sus trabajadores o asociados.