
Ejercicios de Estequiometría de gases – Química
6 de abril de 2017
¿Quieres estudiar pero no tienes tiempo?
11 de abril de 2017En los últimos años del bachillerato, comenzamos a mirar con seriedad el tema de la educación superior, empiezan a llegar esas preguntas de ¿qué queremos estudiar?, ¿en qué universidad?, ¿quiero tomar un descanso antes de seguir?; pero hay una pregunta en especial que puede llegar a aterrarnos: ¿cómo estudio lo que quiero y no lo que mis padres quieren que estudie?
Nuestros padres siempre van a querer lo mejor para nosotros, hace parte de la naturaleza y no podemos negar que tienen mucha más experiencia, pero esto no quiere decir que tengan la última palabra.
Por esto, tener una conversación sana donde cada parte exponga sus argumentos, sin que nadie se sienta herido, criticado o avergonzado; es la mejor manera de afrontar esta situación.
Ten en cuenta estos cortos consejos para este decisivo diálogo:
– Pongámonos en sus zapatos, entendamos que somos su responsabilidad y nos quieren proteger.
– Escuchemos sus argumentos, tomemos como consejos lo que nos dicen para ampliar nuestra visión de la situación.
– Definamos bien quiénes somos, qué queremos, cuáles son nuestras metas y nuestra filosofía de vida. Dejemos claro que la opción de carrera que escogimos, es propia y no está influenciada por otras personas.
– Expongamos casos de la vida real, donde hayan salido a flote las aptitudes que pueden ser fortalezas en la carrera que queremos estudiar.
– Desarrollemos nuestro carácter para que transmitir con seguridad las opiniones, reflejar madurez y determinación. Esto puede mostrar que ya estamos preparados para tomar nuestras propias decisiones.
– Demostremos que su opinión es importante y que queremos su apoyo en todo el camino para ser un profesional.
– Realicemos un análisis de las oportunidades laborales y los sectores en los que podemos desempeñarnos una vez finalicemos, esto puede ser de gran ayuda para decidir.
– Creemos un comparativo con la sugerencia que tienen nuestros padres y lo que deseamos, evaluando pros y contras.
Esto no se trata de una lucha para que gane el mejor. Abrir el corazón y la mente es aceptar las diferencias y querernos tal como somos.
¡Así que no sientas miedo a seguir adelante con tus sueños!